LA SEMANA SANTA, UNA FORMA DE ARTE.

Como todos sabemos, la Semana Santa está repleta de ilusiones, ganas, esfuerzo…

Muchas personas esperan estas fechas impacientes y, durante todo un año, ensayan y se esfuerzan para que todos los detalles estén listos para esos días.

Además, aunque la meteorología no sea favorable y no puedan salir con sus pasos, nunca pierden la esperanza ni la ilusión y vuelven a ponerse con sus preparativos con más fuerzas y ganas para que al año siguiente todo salga como esperaban.

Me ha parecido importante resaltar este tema ya que, desde mi punto de vista, la Semana Santa y todo lo que ella conlleva lo considero una forma de arte.

Podemos ver como cada procesión tiene sus pasos, en los cuales se representan diversas escenas y, cada uno de ellos tiene unos detalles diferentes que los hacen especiales.

Por ello, a continuación, me gustaría presentaros algunos de los pasos que se pasean por las calles de algunas ciudades durante la Semana Santa y que observéis el esmero y cuidado que se ha puesto en cada uno de ellos.

GREGORIO FERNÁNDEZ (1576-1636):

CRISTO YACENTE. Arte Barroco.

Museo Nacional de Escultura de Valladolid.

FRANCISCO SALZILLO (Siglo XVIII):

Paso procesional de la ORACIÓN DEL HUERTO que desfila en la mañana del Viernes Santo con la Cofradía de Nuestro Padre Jesús en Murcia (España).

VÍCTOR GARCÍA VILLALGORDO:

Escultor y pintor. ´´VIRGEN DE LA SOLEDAD``. Hermandad de la Sangre de Cristo y Nuestra Señora de los Dolores de Teruel.

La nueva virgen de Víctor García está inspirada en la imaginería andaluza, con 1,70 de altura y policromía oscura.

HERMANOS FULGENCIO Y RAFAEL BLANCO LÓPEZ:

La imagen original pertenece a los escultores torrevejenses hermanos don Rafael y don Fulgencio Blanco López, constituye una de las obras punta de la imaginería de la Semana Santa torrevejense. En 1954 se le añaden al trono cuatro ángeles, obra también de los hermanos Blanco López, que se sitúan en las esquinas del mismo.

Cuando observamos estas fotos y otras muchas podemos apreciar que los detalles son imprescindibles, el esfuerzo e ilusión puestos en cada momento a la hora de crear los pasos y prepararlos, es lo que nos hace disfrutar de unas procesiones excelentes y colmadas de sentimientos. También he de mencionar que, desde mi punto de vista, como verdaderamente se siente una procesión es viviéndola en directo o formando parte de ella.